¿Por donde entro?.2014. |
El
amor tiene que cocinarse primero dentro de ti, a fuego lento. Es comida de
diario, pero es gourmet. Si es solo por fuera, es sequia por dentro. Este desierto
interno nos convierte en mendigos del amor.
Oscar
50 años. "No tengo éxito en el amor comienzo una relación con la esperanza de que esta vez salga mejor y después de un
tiempo, no se qué pasa me doy cuenta que estoy en una pesadilla me persiguen,
me hostigan y yo no sé qué hacer”.
Marta:
44 años. "Estoy muy cansada, en mi trabajo todo bien, pero en el departamento de los amores,
nada. Llevo tantos años buscando una pareja y siempre me estrello. Tengo
dos matrimonios que terminaron en divorcio, es un mal sueño, de verdad ya no
puedo mas".
Dora
30 años, "Terminé mi carrera y ya quiero tener mi pareja, pero este
facultad es mas difícil que la de
medicina". "No encuentro nada, los que me gustan están casados y llegan
muchos a querer vivir de mi". "Yo soy una mujer inteligente la verdad no
entiendo nada en los amores soy un fracaso".
Mario:
Es un caso triste solo tiene 29 años terminando una relación de 10 y ya se
siente acabado en el tema del amor. "La lucha a sido terrible me he sometido
a tantas cosas y al final no ha servido de nada. Nunca pensé que esto
terminaría así”
Tener amor es una necesidad humana pero muchos viven obsesionados con la necesidad de tener pareja. Salen a la calle con el solo
propósito de encontrar pareja, otros viven su vida con el único tema de la pareja la que tienen o la que está por llegar. Una gran
cantidad de personas están adictas al amor pareja y pagan cualquier precio por tenerla. Todos estos parecen mendigos de amor.
En la búsqueda del amor todos hemos tenido nuestra propia dosis de retos y corazones partidos. A amar se aprende como a todo practicando y cometiendo errores. Pero todo tiene un límite,
cuanto antes nos demos cuenta de donde está el limite, antes comenzaremos a
sanar y aprender. Los
mendigos no solo se duelen una u otra vez es que duelen muchas veces sin
tomar conciencia de sus dolores sin reconocer que el camino de la obsesión no
es acertado, para conseguir lo deseado. Aprender sobre el amor eso que todos sin excepción estamos buscando parece ser una de las asignatura de la vida. Sin embargo, en los mendigos del amor el camino del aprendizaje se hace tortuoso porque no se detienen a examinar sus experiencias para aprender de ellas. La experiencia nos enseña que si practicamos el auto amor es muy probable que encontremos alguien que ame lo que somos.
Para
ser practicantes del amor es efectivo practicar con una
mascota ese amor puede enseñarnos mucho, ellas nos aman a pesar de todo.
Nos brindan la oportunidad de aprender a amarnos, de darnos el tiempo necesario
para sanar heridas. Además de ayudarnos a mantener aceitado el corazón para cuando practiquemos el amor humano. Una persona que se ama, tiene la capacidad de
amar y sabe cómo hacerlo. Solo tiene que dar lo que ya tiene y suele reconocer
quién tiene amor para compartir.
Si no te gustan las mascotas puedes cultivar un huerto. Podrás sembrar
todo el amor que tienes y el que darás a quien quiera compartir el suyo. El amor
es un don muy preciado pero cuando lo entregamos a quien nos quiere se
daña. Se convierte en lucha de poder, manipulación, control y en mendigos de amor.
La
autora es Psicóloga Clínica en practica privada.
(787)399-3114
preguntaleathalia@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Espero tu comentario